Un color marrón tiñe la vista desde la ventana de mi pieza
Un cuervo grita sobre los árboles aún secos, pero el sol se entremezcla con los colores de las casas de Trieste, y da una sensación de alivio
Con la ventana abierta respiro un aire fresco y aún siendo el mediodía no siento ganas de levantarme, es que de fondo escucho Duke ellington, “Sound of love “ y eso me inspira para contar lo que veo, mezclado con lo que siento.
Debo preparar ésta canción para el jueves que viene, que curioso, no se inglés nunca estudié éste idioma, y tampoco se jazz, ambos siempre me gustaron y los escuché hasta el cansancio pero por vueltas de la vida no los aprendí.
Tienen una belleza muy particular, creo saber que es…que a ambos no los entiendo, y los acertijos siempre son encantadores, tal vez es esa parte mía curiosa y desafiante que tantas veces me empuja seguir hacia delante, así que por supuesto no voy a bajar los brazos ,estudiaré como se pronuncia y que Dios me ayude.
Escucho y escucho, para aprender la melodía mientras observo que entre el revuelto de las sábanas ,está el manual de italiano, porque si seguimos sumando curiosidades ni siquiera es que tengo que aprender ésta canción jazzera en mi país, sino como conté antes en Italia, donde tampoco soy Gardel con la lengua, pero por lo menos me las ingenio para pronunciar los suficientemente bien como para que me saluden y presentarme aclarando que soy Argenta hasta las manos.
Volviendo a la ventana ,éste fenómeno de los cuervos viene trayéndome una extraña impresión en mi interior , algo raro mezclado con feo y a su vez natural, por lo menos aquí.
Se conoce al cuervo por sus cualidades de ave carroñera y oportunista, no es bien vista; por supuesto no puede compararse con la ternura de un colibrí o el canto de una calandria verdad? es negro, y aunque ésto no tiene ninguna connotación racial debido a mi propio tinte natural, dicho color lo hace parecer siniestro,algo asociado con la muerte …y ese canto áspero, más bien que asemeja un grito en las tardes triestinas invernales,rodean la ciudad y a veces me pone nostálgica.
Ayer esperaba el bus y mientras tanto se apiñaron en el cielo muchos de ellos haciendo ese sonido rasposo.
En Argentina, en las ciudades y en especial en la calles porteñas tenemos miles de palomas, que andan panchas por su casa. Acá el rey es el cuervo ah !y no puedo olvidarme de su reina :la gaviota, que esa sí es bella, deleita verla hacer vuelos rasantes y veloces , desplegar sus alas blancas es maravilloso, sin embargo con lo encantadora que parecen ( aclaro algo que me llamó la atención:aquí dejan que te acerques mucho cosa que no me pasó en otros lugares donde las vi) , también tienen un costado cuervoso por así decir, días atrás un compañero nos comentó que sacó fotos que no quise ver de una gaviota comiendo o rapiñando un pedazo de paloma muerta, si, es desagradable pero parece que la blanca gaviota se tiñó cual dálmata de pintitas negras, adesso( ahora) ya no las miro con tanta confianza.
“hazte fama y échate a dormir “ será por eso que aún reposo en la pieza?, ok, no quiero saber lo que piensan
En breve se me termina el repeat de la canción que pasa por enésima vez en mis oídos y me tendré que levantar a ordenar la pieza, cocinar, y trucarme ( maquillarme) para salir al médico Dr. Pisant ,que verá mi piede ( pie)curioso su apellido, ya que el dolor aparece cuando voy a : “Pisar” en fin, la cosa es que parece se encaprichó en dolerme desde que llegué al otro lado del río, como dice Drexler, aunque en mi caso es al otro lado del charco atlántico.
Veré si la suerte me acompaña y me dan algo justito para el dolor del piecito y anche(también)la capocheta( testa)…seguramente por lo segundo me derivan…otra vez no quiero saber lo que se piensa por ahí.
continúa continuando...
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